Desafío Uniendo Pueblos 2011

Tras tomarme 18 días en diciembre volví a los entrenamientos. Los primeros 10 días costaron como siempre, pero tras trabajos de cuestas, algunas pasadas explosivas y constancia los fondos de fin de semana llegaron sin demasiado aplomo.


Sumado a que varios días nadaba temprano, 3 o 4 veces por semana metí doble turno.

Este año volví a Lobos a correr los 30km del DAKAR DE LOS POBRES.

El segundo domingo de enero con Javier, Maxi y Damián nos dirigimos hacia Lobos, donde nos encontramos con Marcos y tras un poco de movilidad arrancamos la carrera.

La mañana arrancó fresca y a medida que subía el sol se fue calentando, pero sin llegar a los 40 pico de grados del año anterior.

Lo que me gusta de esta carrera es lo monótona que es: camino de ida y vuelta, paisaje de campos, poco reparo, desolación total. Y después preguntan si los fondistas no somos un poco masocas...
La idea inicial era correr la primera mitad a 5 min x km y la vuelta ver que pasaba.


El ritmo era apasible, pero las paradas técnicas comenzaron. 1ero, para hacer los primero y llegando al km 12 los 2do. Mejor parar, tomarme el tiempo y no repetir la experiencia del año anterior.

Tras salir de boxes, liberado, empecé a buscar a mis compañeros que me habían sacado algunos minutos de ventaja.

A la altura del retome consigo darle alcance a Javier y Damián y tras calcular la ventaja que me llevaban los otros 2 calculé que con suerte cerca del km 20 podía encontrarlos.

Lo que no tuve en cuenta fue el viento en contra. La sensación era la de una mano gigante en la frente que no permitía ir para adelante.

Por suerte me sentía muy bien, por lo que el esfuerzo se sentía pero aun asi tenía resto.

Cerca del km 21 lo veo a Marcos con un problema en la pierna y en el 24 aproximadamente a Maxi con calambres.

Con la gorra para atrás, y remando a más no poder, los parciales se mantenían parejos y la llegada estaba cada vez más cerca.


Al llegar al asfalto es sabido que no queda nada. Aceleré y completé el recorrido en 2:30. (1.17 para la ida-viento a favor- 1.13 vuelta c viento en contra).

Nada despreciable para la época del año, el circuito, la temperatura y las paradas técnicas.

A la llegada, fruta, turrón, Gatorade, agua y todo lo que se me cruzó por delante.


Con los chicos nos relajamos y elongamos en la pileta helada, luego una ducha y un asado en un cuchitríl de la ruta.

Lamentablemente volví a caer con colitis después de esta carrera. Será el agua?